Mis rosales damascenos ( II )
Mis rosales damascenos de legado familiar son plantas que crecen en sus propias raíces. Algunos os preguntaréis qué diferencia un rosal no injertado de uno no injertado. El resultado salta a la vista. Rosales como los gallica o los damascenos tienen una densa trama de raíces horizontales, casi rizomas, que les permiten llenar todo el espacio que tienen disponible. De esta manera, ellos mismos se van regenerando y a medida que envejece o se recorta una vara antigua, de inmediato, del nivel del suelo, emerge otra. En cambio, cuando estos rosales se injertan su crecimiento se limita al que salga del punto de injerto
Esta supuesta rosa Celsiana tiene un crecimiento muy vigoroso. Puede servir perfectamente para una valla. Inclinando sus ramas y colocándolas en horizontal podemos optimizar su floración.
El punto más controvertido de todos es el relativo al de su poda y cómo llevarla a término. En todo caso, las podas fuertes las hago a final de mayo o inicios de junio, con la floración ya pasada. Algunos autores consideran que estos rosales hay que tocarlos lo mínimo posible para conservar su carácter, aunque, cuando están colocados exentos, es decir en macizo, si los dejamos crecer sin cortapisas llegan a crear un conjunto demasiado enmarañado y carente de toda forma. Después de unos cuantos años haciendo pruebas, creo que lo mejor es podarlos a un tercio de su altura en las fechas que ya he indicado. De esta manera se consiguen los siguientes objetivos:
1) ventilar el espesor de ramas y prevenir la roya, que es el único hongo que ataca a estos rosales.
2) dar tiempo al rosal para que emita nuevas ramas. Son rosales que en ningún caso florecen en la madera del año actual. Por tanto, con una poda muy drástica en invierno probablemente eliminemos toda la madera que estaba preparada para florecer.
2) Renovar el follaje, que es un atractivo añadido de estos rosales. Aunque no se vea afectado por hongos, el follaje de mi "Celsiana", al envejecer pierde brillo y llega al otoño en condiciones pésimas. Con esta nueva brotación de verano los rosales siguen teniendo un aspecto agradable.
En cambio, en cuanto a las "Celsianas" que tengo plantadas en la valla, prefiero no tocarlas. Aprovecho su ausencia y la laxitud relativa de los tallos para colocarlos a mi mejor conveniencia.
Esta supuesta rosa Celsiana tiene un crecimiento muy vigoroso. Puede servir perfectamente para una valla. Inclinando sus ramas y colocándolas en horizontal podemos optimizar su floración.
El punto más controvertido de todos es el relativo al de su poda y cómo llevarla a término. En todo caso, las podas fuertes las hago a final de mayo o inicios de junio, con la floración ya pasada. Algunos autores consideran que estos rosales hay que tocarlos lo mínimo posible para conservar su carácter, aunque, cuando están colocados exentos, es decir en macizo, si los dejamos crecer sin cortapisas llegan a crear un conjunto demasiado enmarañado y carente de toda forma. Después de unos cuantos años haciendo pruebas, creo que lo mejor es podarlos a un tercio de su altura en las fechas que ya he indicado. De esta manera se consiguen los siguientes objetivos:
1) ventilar el espesor de ramas y prevenir la roya, que es el único hongo que ataca a estos rosales.
2) dar tiempo al rosal para que emita nuevas ramas. Son rosales que en ningún caso florecen en la madera del año actual. Por tanto, con una poda muy drástica en invierno probablemente eliminemos toda la madera que estaba preparada para florecer.
2) Renovar el follaje, que es un atractivo añadido de estos rosales. Aunque no se vea afectado por hongos, el follaje de mi "Celsiana", al envejecer pierde brillo y llega al otoño en condiciones pésimas. Con esta nueva brotación de verano los rosales siguen teniendo un aspecto agradable.
En cambio, en cuanto a las "Celsianas" que tengo plantadas en la valla, prefiero no tocarlas. Aprovecho su ausencia y la laxitud relativa de los tallos para colocarlos a mi mejor conveniencia.
"No hay nada más difícil para un pintor en verdad creativo que pintar una rosa, porque antes debe olvidar todas las que antes fueron pintadas".
Henri Matisse.
Comentarios
En mi opinión no deben podarse nada en invierno, salvo para lo básico: retirar madera muerta, y despuntar, si se considera oportuno. Es una lástima perder la floración por podar fuera de época.
;)
Y tomo nota, yo a yolande la podé fuerte después de su primera floración pero las ramas se hicieron el doble de altas por lo que tuve que recortar un tercio éste invierno para que no sacara una floración "rascacielos"
Por cierto, en la base, creo que todos o casi todos saliendo del nudo (está algo mas bajo de ras) han salido montón de tallos,
...¡son tantos que desconfio!
besos,
Sólo lo cambié de lugar en el momento oportuno para que lo "vea" el vecino...jejeje
Saluditos.
besitos,
Lo del vecino me ha encantado #:))
Bonitas fotos en las dos entradas, Josep.
A reveure.
Mayos, haces muy bien. Yo tambien hago mucha jardinería de cara a los vecinos de delante...
Ciao!!
Esperaré con ganas esas flores, Pep.
A reveure.