Duchesse de Montebello




Normalmente suelo ver bastantes defectos a todos los rosales. Para encontrar lo que más nos conviene según nuestros gustos hay que ser crítico y, en ocasiones, tomar decisiones tajantes respecto de rosales que nos dan resultados pobres o no nos terminan de causar todo el buen efecto que queremos.







Sin embargo, todo este sentido crítico se desvanece en cuanto veo las flores de Duchesse de Montebello, rosa gallica, de problemático encasillamiento en este grupo por su coloración pálida, dentro de una familia dominada por el cromatismo intenso. Brent Dickerson la considera como híbrida de noisette, y probablemente tenga algún ancestro refloreciente ya que, a partir de ella, se han hibridado rosas remontantes (como Chaucer, una de las primeras rosas de David Austin).




Según Peter Beales, es un componente adorable del grupo gallica. Su año de hibridación fue 1829, siendo su artífice el francés Laffay. De flores pequeñas (de unos siete centímetros de diámetro) y bien perfumadas, posadas sobre un arbusto ordenado y con una coloración que Beales describe como un suave rosa femenino.




A pesar de su genética parcialmente oriental, sólo nos obsequia con una floración que dura cerca de un mes, en mi clima, el de mayo. Lo bueno se hace esperar y no puede estar permanentemente en oferta. Para mí es una de las rosas antiguas con una forma más exquisita. Lo tiene todo: anillo, cuarteado y botones. No es raro que David Austin se fijara en ella para iniciar su línea de rosas inglesas, los atributos antes señalados son una permanente objetivo para él y por ello no es raro que se sirviera de Duchesse de Montebello para conseguir estos efectos en sus rosales.






Mi ejemplar está en sus propias raíces, fue adquirido en Vivers de Moleto, durante una de mis emergencias - fuera de temporada de plantación a raíz desnuda- de gallicas. Tiene mucha potencia en su sistema de radicular, por lo que resulta muy colonizadora en sentido horizontal. Ello supone una ventaja para facilitarnos su propagación, dado que simplemente dividiendo la mata podemos obtener otro ejemplar.




"No hay nada más difícil para un pintor en verdad creativo que pintar una rosa, porque debe olvidar todas las que antes fueron pintadas".
Henri Matisse.

Comentarios

Diseñador ha dicho que…
Qué mono el botón ji ji ji. El color es un blush de toda la vida :).

¿Qué tipo de aroma tiene?.

Aaayyyy (suspiro).

Gracias, Josep ;).
Cristina ha dicho que…
La de arriba soy yo: he cambiado la portada, me deslogueé, y me volví a loguear como diseñador. Se nota que mañana es lunes jajaja.
Este rosal es uno de mis tormentos,seguramente no le gusta estar en la parte de atrás del parterre, o no lo sé podar; crece enmarañado la lluvia lo vence, lo tengo que tutorar y aún así apenas se ven las flores.¿Seria sensato trasplantarlo y darle más espacio?
espero tu consejo.
Con afecto,
MAruxa.
iolanda ha dicho que…
se me antoja muy romántica, y la descripción de Bearles le viene a dedo, rosa femenino...
dices que lo tienes de sus propias raices, eso es sin acodo ¿no?
me resulta chocante, a ti te crece ordenado y a maruxa enmarañado...
seguir informando, una de las cosas que quiero saber es que características les diferencia tanto según el lugar.
ah y ¿olor?
gracias Josep
saluditos,
Josep ha dicho que…
Hola Haw y Yoli, empezaremos con el aroma,jejeje... Huele, pero qué queréis que os diga, hay rosas que huelen más. Aunque huele, no debe de oler hasta el punto de acordarme de esta rosa por su aroma.

Yoli, Elke Embo reproducía determinados rosales a partir de esquejes, es decir, que son rosales no injertados. Por tanto, conservan la habilidad de la especie silvestre ( R. gallica) para ir colonizando espacios. Al ponerle cualquier patrón o portainjertos, todo el crecimiento que tenga el rosal será a partir del punto de injerto, es decir, no crecerá con sus propias raíces, que en el caso de DdM son reptantes.

Maruxa, te hablo desde mi punto de vista, de clima mediterráneo y suelos de muy mala calidad y escasa profundidad. Yo no lo veo un rosal para el fondo de un parterre, quizás fuera mejor para una parte delantera.El crecimiento, en mi caso, es más a lo ancho que a lo alto (tiene una talla modesta, no llega al metro). Nunca me había cedido por causa del peso, pero este año, al ir muy cargada de rosas y al haber llovido mucho, sí que la he tenido que recolocar para poder ver las flores. Algo así le pasa a Charles de Mills, que creo que también cultivas, las flores son tan grandes que ceden por su peso. No ocurre lo mismo con Belle Isis, de la cual hablaré en otra ocasión, que al tener un crecimiento más estructurado se mantiene bien erguido. Yo, Maruxa, lo que haría sería, ahora que habrá terminado la floración o estará a punto, si tu ejemplar es injertado, es sacar unos esquejes y clavarlos ya definitivamente en el lugar donde quieras poner el rosal. Creo, quizás me equivoque, porque siempre hablo desde el punto de vista de mi percepción, que este tipo de rosa de tendencia expansiva, injertada, termina abriéndose como un abanico desde la base del punto de injerto. En cambio, en sus raíces, brota libremente por donde quiere, sin el corsé del portainjertos.

Saludos!
Nemorino Grataculs ha dicho que…
Hola a tothom,

tuve durante un tiempo a Duchesse de Montebello y las rosas y hojas son, tal cual, como lo muestra Josep.

Encuentro su aroma muy coherente con la flor. Es un tipo de fragancia que defino como femenino (igual me ocurre con Glamis Castle) es elegante y fino.

A reveure,

Nemorino.
iolanda ha dicho que…
Ahí es dónde yo queria ir a parar, aqui en mi patio de la ciudad no puedo permitirme tener las plantas en su raiz, pero tengo muy claro que en la finca las cosasa serán de otra manera, salvo algún rosal que sea demasiado "invasivo" si se diera el caso, prefiero, sobre todo con las antiguas, que se desarrollen dónde mejor quieran y cómo quieran.
Gracias,

Saluditos,
Josep ha dicho que…
Nemorino, la has dejado de tener ? A mí me gusta especialmente, me costaría no tenerla ahora que me he acostumbrado a su presencia. Saludos!
Nemorino Grataculs ha dicho que…
Así es, creo que la perdida fue por culpa de un ataque instintivo de la mascota peluda de la casa, combinado con la debilidad del rosal tras un ataque de ácaros que, por cierto, ya me están visitando. Estos tienen las horas contadas.

Si tuviera un jardín -el de la costa no sirve para rosas- o me encargara del que tengo en casa... lo reintroduciría junto con Cristata.

A reveure,

Nemorino.

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