Más sobre mi programa de hibridación casero: la primera

Esta rosa es la primera que me gustó de mi primera tanda de semillas sembradas. La semilla fue obtenida en el año 2006 y en 2007 dio sus primeras flores. Este año se ha consolidado y me ha seguido convenciendo y espero que el año que viene, cuando la vea sobre un patrón potente de rosa canina, podré hacerme a la idea de si es o no un buen rosal, por lo menos en tanto que flor (lo de comprobar la validez como arbusto de jardín es harina de otro costal).

En cuanto a su progenie, no puedo dar datos precisos, se trata de una semilla obtenida de una polinización abierta de un rosal rojo desconocido. La flor es muy llena de pétalos, de un color rojo sangre que en estas fotos ha quedado bastante bien plasmado. Tiene un olor muy leve y una muy buena salud. Si la planta joven ya goza de buena salud, al ir madurando probablemente conserve esa resistencia a los ataques fúngicos.

En definitiva, la primera flor ya se mostró bien llena y con un color rojo de laca de geranio, pero durante el segundo año, la forma ha mejorado, al mismo que tiempo que el llenado de pétalos y la intensidad del color. Esta primavera os contaré mis impresiones en relación con el ejemplar que he podido injertar. Interinamente la he denominado Panto, no por mi afición a la tan "simpática" cantante, sino por su color y sus formas, que al verlas me evocaron ese personaje. El año que viene, con más fundamento, si vale la pena este rosal ya le pondremos un nombre más aceptable.

"Una de las cosas más trágicas que conozco sobre la naturaleza humana es que todos tendemos a posponer la vida. Soñamos con un mágico jardín de rosas tras el horizonte, en lugar de disfrutar las rosas que están floreciendo hoy tras nuestras ventanas".
Dale Carnegie.